La celebración de la Primera Comunión es un momento
especial, es un día importante en la vida de los peques de la casa, lo preparan
durante mucho tiempo junto a sus amigos y eso hace que su ilusión crezca día a
día. ¿Y los Padres? Pues para ellos también es especial porque van viendo como
cada día son menos peques, el tiempo pasa rápido... Y lo único que puedes hacer para detenerlo un
instante que es?? FOTOS! :)
Todavía recuerdo cuando fui a hacerme el reportaje de fotos de
mi primera comunión... Era la primera vez que iba a un estudio de fotografía, a
posar con mi vestido nuevo delante de un falso jardín pegado a la pared, con un
enorme flash que me deslumbraba cada vez que disparaba el fotógrafo. Posar no
era mi fuerte, ni lo es a día de hoy lo reconozco... Mira aquí, pon las manos
así...ahora mira allí...sonríe... no se puede decir que guarde un gran recuerdo
de aquel momento, ¡oh que bien me lo pase en la sesión de fotos de mi comunión!
mmmm no... Por eso no quiero a hacer ese tipo de sesiones, es más... ¡me niego!
si lo que buscas son 4 fotos de tu niño/a mirando a cámara con su sonrisa de
foto... NO SIGAS LEYENDO!
Sólo se comulga por primera vez una vez en la vida!! Con un
traje precioso! y junto a tu familia que tanto te quiere... es un momento
genial para divertirse haciendo fotos! Los
niños han de sentirse cómodos, olvidarse que están posando y pasarlo bien,
correr, saltar, reír... en definitiva ser ellos mismos, y que sea eso lo que
muestra la cámara. Por eso me encanta hacer las sesiones en exteriores, montar
un decorado, preparar el atrezzo... aprovechar la preciosa luz del sol y
disfrutar del aire libre.
Conseguiremos fotos naturales, espontáneas,
con su familia, un álbum diferente al que se venía haciendo años atrás... pero
que seguramente tu hijo recordará con una sonrisa.
Mil gracias a los papas de Claudia por
dejarme mostraros algunas fotos del reportaje de su princesa ❤
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